
La guía práctica que necesitas antes de cortar metal
Si alguna vez has trabajado con una máquina de corte láser de fibra, seguramente te has hecho la misma pregunta que miles de fabricantes en México:
👉 ¿Qué gas debo usar y con qué presión para lograr cortes rápidos, limpios y rentables?
La respuesta no es única, porque depende de tu material, el espesor de la lámina, la potencia de tu máquina y hasta del acabado que quieres ofrecerle a tu cliente. Lo que sí es seguro es que elegir bien el gas y la presión puede marcar la diferencia entre un corte mediocre y un corte perfecto.
En este artículo te explicaremos todo lo que debes saber, con ejemplos reales de las máquinas Glorystar Laser, pensadas para la industria mexicana que busca productividad y calidad internacional.
¿Por qué el gas es tan importante en el corte láser?
Imagina que tu rayo láser es un bisturí quirúrgico. Puede ser preciso, pero si no hay un sistema que expulse el material fundido y proteja el área de corte, los resultados serán pobres. Ahí entra el gas auxiliar, que cumple tres funciones clave:
- Expulsar la escoria y mantener abierta la ranura de corte.
- Proteger el lente de salpicaduras metálicas.
- Determinar la velocidad, el color del borde y el costo de producción.
En pocas palabras: sin gas adecuado, no hay calidad de corte.
Los tres gases protagonistas
- Oxígeno (O₂)
- Perfecto para acero al carbono y espesores grandes.
- Genera una reacción de oxidación que ayuda a penetrar.
- Borde oscuro, ideal cuando la estética no es prioridad (estructuras pesadas, construcción).
- Nitrógeno (N₂)
- El favorito para acero inoxidable, aluminio y cobre.
- Gas inerte, evita oxidación.
- Borde limpio, brillante y sin necesidad de retrabajo.
- Indispensable en muebles metálicos, electrodomésticos y decoración.
- Aire comprimido
- La opción más económica.
- Buena para inoxidables y aceros delgados.
- Borde aceptable, aunque no tan premium como el nitrógeno.
- Muy usado en talleres pequeños y medianos.
¿Y la presión?
El gas no solo importa por el tipo, sino también por la fuerza con que sale de la boquilla.
- Muy baja → la escoria no se expulsa y el corte queda sucio.
- Muy alta → el consumo se dispara y el corte se desestabiliza.
Aquí algunos valores de referencia (que pueden variar según la potencia de la máquina):
Material | Espesor (mm) | Gas recomendado | Presión típica |
---|---|---|---|
Acero al carbono | 8–20 mm | Oxígeno | 0,8 – 2 bar |
Acero inoxidable | 1–3 mm | Nitrógeno | 8 – 12 bar |
Inoxidable grueso | 4–12 mm | Nitrógeno | 10 – 16 bar |
Aluminio / cobre | 1–6 mm | Nitrógeno | 12 – 18 bar |
Corte económico fino | ≤3 mm | Aire comprimido | 6 – 10 bar |

Casos reales con Glorystar en México
- Un taller en Monterrey con una GS-CE PRO 6000W:
Cortando inoxidable de 3 mm, usaron nitrógeno a 12 bar → cortes de 60 m/min, bordes brillantes listos para entrega. - Un fabricante de estructuras en Querétaro con una GS-TG 12000W:
Cortando acero al carbono de 20 mm con oxígeno a 1 bar → penetración total y costo de gas mínimo. - Un taller de herrería en Guadalajara con una GS-H 3000W:
Cortando inoxidable de 2 mm con aire a 8 bar → bordes aceptables, bajo costo y competitividad en mobiliario económico.
¿Qué hace diferente a Glorystar?
Las máquinas de Glorystar no solo cortan con potencia, también piensan en el gas:
- Control automático de presión.
- Cambio rápido de gas desde el software CNC.
- Sistema de ahorro que reduce el consumo hasta en un 30%.
- Compatibilidad con gases de alta pureza, para clientes que buscan acabados premium.
Y lo más importante: cada equipo pasa por 339 pruebas de calidad antes de salir de fábrica, lo que garantiza estabilidad y precisión incluso en turnos de producción de 24/7.
El gas y la presión correctos no son un detalle menor, son el secreto de un corte perfecto.
- Usa oxígeno para acero al carbono grueso.
- Usa nitrógeno si la estética es clave en inoxidables y aluminios.
- Usa aire si quieres ahorrar en espesores delgados.
En México, donde la competitividad industrial exige calidad y costos controlados, contar con la guía adecuada y con equipos confiables como los de Glorystar Laser puede marcar la diferencia entre un taller promedio y una empresa líder.